Por EQUIPO DE NUTRICIÓN
Continuamos aportando ideas de recetas dulces, y de temporada para las tardes de otoño, cada vez más oscuras y frías.
En esta ocasión hablamos de las castañas, un fruto seco típico del otoño y del invierno que se caracteriza por ser menos graso y más rico en fibras como el almidón e hidratos de carbono complejos. Por otro lado, hablamos del boniato, alimento prebiótico por excelencia para cuidar de nuestra salud intestinal.
¿Qué te parece? ¿Comenzamos a crear en la cocina?
¡Toma nota!
CREMA DE CASTAÑAS
Ingredientes.
- 300g de castañas
- 300 ml de leche
- 5 dátiles
- Una vaina de vainilla
Elaboración:
Precalienta el horno a 200º. Lava las castañas y hazles un corte con un cuchillo en la cáscara. Hornea durante30 minutos y deja enfriar.
Retira la cáscara y coloca las castañas asadas en un vaso de batidora potente o procesador de alimentos, junto a la leche, 3 dátiles y media vaina de vainilla.
Tritura bien todo hasta obtener una mezcla untuosa y sirve.
BIZCOCHO DE BONIATO
Ingredientes
- Un boniato grande
- 50g de almendras en polvo
- 50g de copos de avena
- 50g de aceite de oliva virgen extra
- 50 ml de leche
- 5 dátiles
- 2 cucharadas de cacao puro
Elaboración
Coloca en un bowl la harina de almendras con el cacao puro y la harina de avena y reserva.
Pela el boniato y ponlo a cocer en un cazo con suficiente agua hasta que esté tierno.
Una vez cocido, trocéalo para añadirlo al vaso de la batidora potente o del procesador de alimentos. Por otro lado, añade dulce de dátil (tritura los dátiles con un poquito de agua hasta obtener un puré claro) y el aceite de oliva, y tritura para que e integren los ingredientes.
Añade la mezcla de harina de avena, almendra y cacao junto al boniato y añade también la leche. Si la masa queda demasiado sólida, añade un poquito más de leche, y si queda demasiado líquida, un poco más de harina. Una vez quede una textura fácil de trabajar, extiende en un molde forrado de papel de horno. Para que quede la textura de brownie es importante apretar la masa hacia al fondo con la ayuda de una cuchara para que quede bien compacto.
Hornea durante 50 minutos aproximadamente a 180º y una vez pasado ese tiempo, apaga el horno, abre la puerta y déjalo reposar dentro hasta que atempere.
Antes de servir, añade un poco de chocolate 85% derretido por encima… ¡y disfruta!
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